"Son tiempos malditos, cuando los locos guían a los ciegos"

Ayer  3 de Octubre del 2011, se realizó en clase una serie de lecturas sobre diferentes artículos leídos por algunos alumnos, y en ellos hacían referencia a diversos temas, que el profesor, clasificó y luego estableció, (en consenso con el grupo) su posición respecto de la rosa de los vientos. En el Oeste que representa la incertidumbre, se estableció las agencias calificadoras junto con Wall Street; en el Sur, el desempleo (ya que es evidente que siempre afecta más a las zonas geográficas de esta posición); en el Sureste, se colocaría la Guerra, tan característica en toda la historia. Y en el centro, estarían los gastos que son mayores que los ingresos.    

 
A continuación, estableceré una relación entre dos de ellos e investigando sobre su vinculación. Tanto el gasto excesivo como el desempleo tienen una relación directa, puesto que lo sucedido en este país, ha sido el quiero y no puedo, es decir, aún a sabiendas, que se sabe que muchas cosas no te las puedes permitir, se ha infiltrado en la sociedad el tener y el aparentar, antes que el ahorrar y ser precavido, convirtiéndose en vivir por encima de tus posibilidades. Esto significa, que cuando gastamos más de lo que tenemos, nos endeudamos y con ello, supone una serie de gastos que como consecuencia, se reflejan a través de la ciudadanía y de (en muchos casos) su desempleo. Si realmente, se llevará a cabo una inversión en tecnología como hacen los tigres asiáticos, nos encontraríamos con una sociedad ahorradora, puesto que independientemente de la enseñanza impartida, si se aplica desde las bases una mayor inversión, esto (aunque evidentemente sea a largo plazo) traerá consigo una serie de ganancias y beneficios, que ayudarán al país a no encontrarse bajo el enorme endeudamiento actual. Sumado a su enorme potencial como fuente exportadora de materias primas, a bajo coste, con un abaratamiento de la mano de obra y su deslocalización. Por ello, el desempleo aporta muchas respuestas a ello, puesto que gran parte de la ciudadanía se encuentra inmersa en una deuda que bien podría haber solucionado sino hubiera invertido o gastado más de la cuenta. Pero cierto es, que hasta que no se ven las orejas al lobo, no se da cuenta uno de la magnitud del problema. Si en vez de recortar tanto en gasto público social, se hiciera una reforma fiscal y la lucha contra el fraude, quizás esto ayudaría a el equilibrio entre ingresos y gastos y con ello solventaría e impulsaría el problema acentuado del paro en nuestro país.

Escrito por sarablancoescolano