Los pronósticos se cumplen. Insultante victoria del Partido Popular en las elecciones presidenciales del 20 N de nuestro país. Todos los medios y analistas apuntaban a una victoria del PP, pero lo que nadie esperaba era la pérdida masiva de escaños que le tocaría sufrir al PSOE registrando los peores resultados de su historia y que sitúan al ejecutivo del partido en una difícil situación ante la cual nadie se pronuncia.
Las elecciones, han dado, están dando y darán mucho de lo que hablar aquí y en todo el mundo. Supone el fin del “zapaterismo” que nos ha arrastrado a la situación que tantos hogares sufren, por culpa de la ineptitud del peor equipo (o debería decir equipos) de gobierno de la historia de nuestro país, quienes haciendo uso de una explícita demagogia y con falacias por bandera, consiguieron mentira tras mentira, acabar con la situación del país, llevándolo de “la Champions League” de los países de Europa, a ser uno de los cuatro quebraderos de cabeza en Bruselas.
Serán también unas elecciones marcadas por la recuperación de IU que vuelve a alcanzar parte del protagonismo perdido en las dos últimas elecciones, situándose en índices de escaños más próximos a los que eran, en torno a los 11 diputados. También UPyD aumenta su número de representantes con 5 diputados, siendo la fuerza política que más crece en estas elecciones. Por desgracia también se recordaran, por el día en que los terroristas, AMAIUR alcanzan representación en el parlamento (7 diputados) y no solo eso, si no, que irrumpen con grupo parlamentario propio. Gran punto en contra de la democracia y que esperemos sirva para que de una vez por todas se cambie la ley electoral que no solo permite calamidades como esta, favorece injusticias como que UPyD sacando 138.000 votos a CiU, este consiga 5 escaños y los nacionalistas, con menos votos, 16 escaños.
España vota un cambio y confía plenamente en el PP para liderarnos en la salida de la crisis mundial. Toda Europa y parte del mundo mira con ojos temerosos a nuestro país, y al igual que sucediera con otros países, se alegran de cambiar de interlocutor, artos de que J.R. Zapatero, desatendiese todos los consejos y sugerencias que se le planteaban. Habrá que ver en qué medida Merkel y Sarkozy, continúan imponiendo sus normas y cuales nos aplican de forma directa como consecuencia del legado socialista. Si bien, les habría encantado un cambio a efectos casi inmediatos, como sucedió en el caso de Italia, deberán esperar un mes hasta que el traspaso de poderes sea total. Esto tendrá su consecuencia en el mercado, y soy de los que piensa, que el hecho de un cambio no hará que mañana el parqué de Madrid se despierte todo en verde.
Nadie tiene el remedio de la crisis, no existe una formula milagrosa, lo que si tenemos son los culpables de esta y hoy los votantes les han castigado. Es el gobierno Socialista que en siete años y medio ha llevado a la ruina este país. En el partido siguen empeñados en esconder a su líder y secretario general del partido, que en esta campaña se ha caracterizado por su ausencia, dado que Rubalcaba ha tratado por todos los medios de ocultarle y desvincular su imagen del partido; tratando también de desvincularse él de los problemas de España, como si los españoles no fuesen conscientes de que el formaba parte del gobierno que nos hundió. No avergonzado de sus actos y responsabilidades, Rubalcaba no ha querido ni siquiera dejar a entender, que renuncia a la dirigencia del partido, ni siquiera de su escaño, después de llevar a los Socialistas a su peor momento histórico, ayudado en gran medida por la poco hábil Elena Valenciano.
Son los primeros datos que arrojan unos resultados electorales sin precedentes en nuestro País. Unas elecciones marcadas por la importancia frente a la situación de la crisis, la respuesta masiva de cambio y los históricos resultados obtenidos por ambos partidos.
Como dijo J.Cesar “La suerte está echada”, nadie sabe lo que augura nuestro futuro después de este golpe de timón de 360º, muchos confían en que lo que se necesitaba era un buen equipo, es indudable que el PP lleva una plantilla de lujo, habrá que ver si su proyecto de gobierno es, útil, efectivo, coherente y su gobierno no supone otro sinfín de tachones y meteduras de pata al que en estos siete años y medio nos ha tenido acostumbrados “El presidente y sus secuaces”.
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